lunes, 14 de diciembre de 2009

Setrakian

Una casa de empeño tiene algo de bazar,de museo y de anticuario de barrio. El prestamista ofrece un servicio que nadie mas puede prestar. Es el banquero de los pobres, alguien al que la gente puede acudir y pedir veinticinco dolares  prestados sin preocuparse de su historial de crédito, empleo ni referencias. Y en medio de una recesión económica, veinticinco dolares era una suma considerable para muchas personas. con veinticinco dolares se pueden comprar medicamentos para prolongar la vida. Siempre y cuando un hombre o una mujer tengan un colateral, algo de valor para obtener un préstamos, él o ella podrán salir de su tienda con dinero en efectivo en la mano: era algo sencillamente hermoso

Extraído de : Nocturna, de Guillermo del toro y Chuck Hogan

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